Tomando tierra en el mundo Flipped

A día de hoy hace una semana que empezó mi formación sobre método “Flipped Classroom” a través del curso del INTEF que lleva por título el mismo nombre. Por ahora hemos realizado distinto tipo de actividades como hacer un video animado a través de Powtoon, publicar un podcast vía Soundcloud o aprender a usar el Padlet como herramienta para compartir ideas, hacer brainsotrming y mil cosas más.

Mis primeras impresiones sobre el curso y el método son muy buenas, ya que me parece que voy a aprender mucho de algo que me gusta y me va a ser muy útil, lo cual es justo lo que buscaba. Tal como imaginaba he podido confirmar que el FC es un método flexible, es decir, que permite ser combinado con otras metodologías y adaptarse a las necesidades de cada alumno o grupo. Esto facilita mi labor como docente y la integración de estas nuevas prácticas en la vida del aula y del cole en general.

Como ya he comentado en el post anterior, mi cole está en un área desfavorecida y el nivel de los alumnos en cuanto a motivación es bastante bajo. A lo largo de esta semana les he ido introduciendo algunas de las cosas que he trabajado en el curso, como por ejemplo la herramienta de edición de presentaciones animadas Powtoon y… han “FLIPado”. Esto me ha dado todavía más ganas de seguir investigando para traerles herramientas y crear materiales originales que les llamen la atención.

Como todavía no hemos empezado con los contenidos de este curso me está dando tiempo para prepararles materiales que nos permitan empezar a flipear. Además creo que las herramientas que ido aprendiendo hasta ahora me van a ser muy útiles y como son bastante intuitivas y manejables espero coger soltura en unos días y poder hacer bastante material.

En principio veo que seguir esta propuesta metodológica supone mucho trabajo, ya que el profesor se tiene que hacer con una buena cartera de recursos de la que ir tirando; pero claro, si queremos adaptarnos a las necesidades de los distintos grupos a los que vamos haciendo frente cada año no nos queda otra que renovar nuestras herramientas ante la necesidad. Si bien es cierto que ello conlleva un gran gasto de tiempo también lo es que el trabajo del profesor lo lleva implícito y la mejora de la educación bien lo merece. Soy de la opinión de que cada pequeño gesto que hagamos en esta dirección nos pone un pasito más cerca del objetivo, así que seguiremos caminando.

A día de hoy creo que el FC va a ser una herramienta más a usar en mi aula en combinación con otras metodologías innovadoras como el ABT (Aprendizaje Basado en Tareas). Quizá cuando vaya cogiendo soltura y viendo los resultados positivos que tiene en mis alumnos la uso de un modo más cerrado; o quizá surjan nuevos métodos que seguir combinando para hacer de la clase un entorno cada vez más perfecto para el aprendizaje… ¿Quién sabe? De momento, por si acaso… ¡FLIPEAMOS!